El viernes santo, Puerto Iguazú se sumergió en un viaje temporal de más de dos mil años para revivir el acto de amor más trascendental registrado en la historia de la humanidad. En una emotiva tarde, personas de todas las edades se congregaron en la Plaza San Martín, frente a la Catedral Virgen del Carmen, para presenciar el Via Crucis Viviente, una representación de los pasos de Jesús hacia su destino divino, la crucifixión.
El elenco de artistas locales cautivó a la multitud con una conmovedora interpretación que recreó los momentos culminantes del viacrucis de Cristo, cada escena fue representada con fervor y devoción, transportando a los espectadores a aquellos eventos históricos.
Para los creyentes, el Via Crucis Viviente es mucho más que una representación teatral; es una oportunidad de reflexión profunda sobre el sacrificio y la redención. Este evento conmemorativo nos recuerda el sufrimiento de Jesús en su camino hacia la crucifixión y su posterior resurrección, simbolizando la esperanza y la salvación para la humanidad.
La tradición del Via Crucis Viviente tiene sus raíces en los relatos bíblicos de la pasión de Cristo y se ha convertido en una práctica común en muchas comunidades católicas alrededor del mundo durante la Semana Santa. A través de esta representación, los fieles buscan conectarse con la esencia de su fe y renovar su compromiso espiritual durante este período sagrado.
(Vídeo: dirección de Cultura)
