En las últimas horas el caudal del rio Iguazú descendió en forma abrupta dejando los equipos de la toma de agua prácticamente fuera del agua, obligando al Instituto Misionero de Agua y Saneamiento a sacar de funcionamiento los equipos reduciendo al mínimo la producción de agua potable ya que solo trabajarán con la toma ubicada en el arroyo Mbocai.
Según indicaron desde Imas, la bajante de rio se registró en un periodo de tiempo muy corto y fueron alertados de la situación por personal de Prefectura Naval Argentina. “Estimamos que las dos represas ubicadas aguas arriba de las cataratas cerraron sus compuertas en forma simultánea para cargar, es la única explicación para un descenso tan rápido del nivel del rio”.
Hasta que la situación se revierta la planta sólo obtendrá 300 mil litros de agua por hora para potabilizar. Esta situación afectará a los barrios más alejados y más altos.
Desde Imas solicitan a las personas que cuiden el agua sobre todo porque no hay perspectivas de normalización ya que depende exclusivamente del aumento del caudal de agua del Rio Iguazú.
(fuente: E. T)