En una osada incursión perpetrada en la noche del lunes, una iglesia greco-católica romana ucraniana en San Vicente fue el blanco de un robo que dejó a la comunidad indignada. Los delincuentes ingresaron al templo y sustrajeron varios objetos religiosos de incalculable valor espiritual y cultural.
El descubrimiento se realizó alrededor de las 7 de la mañana, momento en el cual las autoridades locales fueron alertadas sobre el acto vandálico. Entre los elementos sustraídos se encuentran una cruz de mano de metal, una cucharita de oro, una lanceta de bronce, un copón bañado en oro, una cruz de bronce del sagrario y dos micrófonos inalámbricos utilizados para ceremonias litúrgicas.
El impacto del robo se intensificó al descubrirse que, además de los elementos litúrgicos, los ladrones se llevaron un foco portátil y un prolongador, afectando la capacidad de la iglesia para llevar a cabo sus actividades habituales.
La policía local ha emprendido una investigación exhaustiva con el objetivo de identificar y capturar a los responsables de este acto. Las cámaras de seguridad cercanas a la iglesia se presentan como una herramienta valiosa que podría proporcionar pistas cruciales para aclarar las circunstancias del robo.
Mientras tanto, la parroquia, afectada por este suceso, ha implementado medidas de seguridad para prevenir futuros incidentes de esta naturaleza y salvar la integridad de su patrimonio espiritual.
