Ramón Acuña, un jubilado de 78 años, asesinó a su joven novia de al menos 10 puñaladas en la localidad bonaerense de Isidro Casanova. Luego de matarla, el femicida quiso suicidarse, pero no se quitó la vida y permanece internado. La víctima fue identificada como María Dolores Juncos, una mujer de 35 años, quien alrededor de las 11 de la mañana de ayer fue atacada en una casa ubicada en Fournier 1051, entre las calles Elías Bedoya y Tomás Edison, donde también vivía el acusado.
Todo fue descubierto después de que una empleada de limpieza que trabajaba en el lugar escuchara gritos y, junto a la hija del hombre, encontraron a Juncos tendida en la cama. Acuña, por su parte, también estaba tendido al costado suyo con heridas de arma blanca en la garganta, por lo que llamaron al número de emergencias 911.
Efectivos de la comisaría de San Alberto oeste 4ta. llegaron al lugar de inmediato y constataron que la mujer estaba muerta. El femicida, en tanto, fue trasladado de urgencia al hospital Paroissien, donde quedó internado tras ser operado, señaló la agencia Télam.
El médico legista que concurrió a la escena del crimen estableció de entrada que la mujer sufrió entre 10 y 11 heridas en el cuello. “La mató de múltiples puñaladas. Después, por las pisadas, se ve que él fue al baño y de ahí volvió a acostarse y se cortó el cuello al lado de María Dolores, que estaba boca abajo y vestida”, aseguró Karina, la hermana de la víctima. “Tenían una relación desde hace un año y hoy supuestamente tenían que ver una casa, por eso se quedó a dormir en la casa de él, pero ella no solía hacerlo”, contó la joven.Juncos era madre de tres hijos
En el caso interviene el fiscal Gastón Duplaa, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) Temática Homicidios Dolosos del Departamento Judicial La Matanza, quien aún trata de establecer el motivo del ataque, ya que Acuña, si bien no tenía denuncias previas por violencia de género, al parecer, amenazaba a su pareja. “Él siempre tenía esos arranques de gritarle, la amenazaba, tenía que salir corriendo para estar con él, si se sentía mal, ella tenía que atender el teléfono porque sino aparecía en la casa de mi mamá”, agregó Karina.
En la vivienda de Acuña los efectivos secuestraron un cuchillo que será peritado para determinar si efectivamente fue el usado para matar a la mujer, quien vivía en Lomas de Zamora con sus tres hijas de 15, 10 y 8 años. Duplaa por el momento espera la evolución de Acuña para que sea indagado por el delito de homicidio agravado por el vínculo de pareja existente con la víctima y por haberse perpetrado contra una mujer por un hombre y mediare violencia de género.
“Si está en condiciones de declarar será mañana o pasado, apenas esté en condiciones se le tomará la indagatoria”, precisó una fuente judicial. “Quiero que quede preso y que pague por lo que hizo, de la manera que la mató a mi hermana. Él siempre tenía esos arranques de gritarle, la amenazaba”, concluyó la hermana.
Por lo pronto, el funcionario judicial resolvió pedir la detención del acusado, con la esperanza de que mañana, tras evaluar la condición de salud, pueda indagarlo. “Se me fue un pedazo de mi vida. Mi hija María Dolores, me la quitaron. Es insoportable el dolor”, escribió Rodrigo Juncos, el padre de la joven asesinada a cuchillazos, en su perfil de Facebook.
(Fuente: Infobae)