Guardaparques provinciales y nacionales, con el apoyo de guardabosques de la empresa Arauco, detectaron y desmantelaron estructuras utilizadas por cazadores furtivos en la zona de límite entre el Parque Nacional Iguazú, el Parque Provincial Puerto Península y terrenos pertenecientes a la firma forestal.
El operativo, que se extendió durante dos días, permitió inutilizar un campamento, saleros y sobrados o esperas instaladas en plena selva. Durante el patrullaje, también se hallaron rastros de cazadores en caminos internos y en las márgenes de los arroyos.
En el procedimiento participaron guardaparques de Puerto Península que forman parte del Grupo de Operaciones en Selva zona Norte del Ministerio de Ecología, guardaparques del Parque Nacional Iguazú y personal especializado de la empresa Arauco.
Las autoridades remarcaron la importancia de estos patrullajes conjuntos para proteger la biodiversidad y prevenir actividades ilegales dentro de las áreas naturales protegidas.