El número de muertos en Brasil en las últimas 24 horas fue de 113 personas y no de 383, como había informado el Ministerio de Salud en un primer comunicado. De esta forma, la cantidad de fallecidos llega a 2.575 desde que la pandemia llegó a ese país. En cuento a la cantidad de infectados, superó los 40 mil casos, según datos del Ministerio de Salud el lunes por la tarde.
El nuevo número de muertes causadas por el coronavirus supone una escalada de un 4,58 {3ff13aebe241d80a0f7dbd2f56b77d3811ac54c5405045bb6f635e033c46b244} en las últimas 24 horas. De acuerdo con el boletín divulgado por la cartera, el número de contagiados creció un 4,98 {3ff13aebe241d80a0f7dbd2f56b77d3811ac54c5405045bb6f635e033c46b244},con 1.927 nuevos casos nuevos.
Los estados con el mayor número de casos son: Sao Paulo (14.580 casos y 1.037 muertes), Río de Janeiro (4.899-422), Ceará (3.482-198), Pernambuco (2.690) y Amazonas (2.160-185).
Actualmente, 11 estados tienen más de mil casos registrados de la enfermedad: São Paulo, Río de Janeiro, Minas Gerais, Espírito Santo, Paraná, Santa Catarina, Pernambuco, Ceará, Bahía, Maranhão y Amazonas.
El despacho también indicó que de las personas fallecidas, 7 de cada 10 tenían más de 60 años y contaban con al menos un factor de riesgo, ya fuera una enfermedad cardíaca o pulmonar, o diabetes, y la mayoría eran hombres (60 {3ff13aebe241d80a0f7dbd2f56b77d3811ac54c5405045bb6f635e033c46b244}) y blancos (56,6 {3ff13aebe241d80a0f7dbd2f56b77d3811ac54c5405045bb6f635e033c46b244}).
Desde la llegada del nuevo titular del Ministerio de Salud, Nelson Teich, el pasado viernes, los reportes sobre COVID-19 en el país son divulgados mediante boletines y no comentados en rueda de prensa como acostumbraba a hacer el anterior ministro, Luiz Henrique Mandetta.
Cuatro días después de despedir a su ministro de salud en plena pandemia, el presidente brasileño Jair Bolsonaro dijo este lunes que quiere que esta semana se ponga fin a las políticas de aislamiento social a nivel nacional, aunque muchos estados brasileños señalan que están comprometidos con ellas.
Casi todos los estados brasileños tienen las medidas de quedarse en casa vigentes, algunos hasta mediados de mayo. El principal tribunal del país falló que los gobernadores y alcaldes pueden tomar la decisión sobre las medidas de aislamiento social sin importar la postura del gobierno federal. Mientras tanto, Bolsonaro quiere que rápidamente se reabran para frenar el deterioro de la economía del país.
“Todo lo que se hace en exceso termina generando problemas. Estas medidas no llegaron a su objetivo en algunos estados”, dijo Bolsonaro a la prensa frente a la residencia presidencial en Brasilia. “Espero que sea la última semana de esta cuarentena, de esta forma de luchar contra el virus”, aseguró.
El presidente brasileño apoya un modelo menos restrictivo donde sólo los grupos de alto riesgo estén confinados en casa. Después de que el mandatario reemplazó al crítico Luiz Henrique Mandetta con Nelson Teich como ministro de salud, varios gobernadores y alcaldes indicaron que consideraban medidas de aislamiento más estrictas.
Teich había publicado previamente un artículo que defendía la cuarentena, pero no se ha expresado desde el ambiguo discurso de presentación del viernes y no es claro qué hará en el puesto.
Bolsonaro habló un día después de reunirse al aire libre con decenas de partidarios que quieren que cierre el congreso y tribunal supremo del país. Su presencia en dicha demostración genera extensa indignación en un país que soportó una dictadura militar entre 1964 y 1985.
(Fuente. agencias)