En el primer diálogo entre los presidentes Alberto Fernández y Jair Bolsonaro imperó la voluntad de “dejar atrás los desencuentros”, dijo este lunes el embajador argentino en Brasilia, Daniel Scioli, quien resaltó que se trató de una reunión distendida, de algo más de una hora, que incluyó invitaciones recíprocas y en la que el brasileño expresó sus condolencias por el deceso de Diego Maradona.
La reciente muerte del “ídolo popular” Maradona (como lo definió Bolsonaro), el coronavirus y las gestiones por la “vacuna de Oxford”, del laboratorio Astrazeneca, con el que ambos países tejieron acuerdos, y una invitación a Brasil fueron parte de la charla.
Así lo sintetizó a Télam Scioli, para quien ambos presidentes “estuvieron inspirados en la decisión histórica de los exmandatarios Raúl Alfonsín y José Sarney de dejar atrás rivalidades y buscar consensos”.
“La presencia de Sarney en la reunión virtual fue inspirador para todos”, afirmó Scioli.
Bolsonaro dio las condolencias por la muerte de Maradona, diciendo que era un ídolo popular
DANIEL SCIOLI
Fernández encabezó más tarde junto a Bolsonaro la ceremonia por el Día de la Amistad Argentino-Brasileña, que conmemora el encuentro que hace 35 años mantuvieron Alfonsín y Sarney en Foz de Iguazú, puntapié para la posterior creación del Mercosur.
Según se informó oficialmente, antes del acto oficial -por viedoconferencia- los jefes de Estado de Argentina y Brasil mantuvieron una videollamada privada y durante el encuentro público destacaron el rol del Mercosur como herramienta de integración.
Según reconstruyó luego Scioli, el tono “ameno” de la charla privada surgió a partir del fútbol.
Fernández comentó que “la rivalidad” entre argentinos y brasileños había que “dejarla para el fútbol” y a partir de ese comentario, Bolsonaro, hincha de Palmeiras, se refirió a Maradona, quien falleció el pasado miércoles.
“Bolsonaro dio las condolencias por la muerte de Maradona, diciendo que era un ídolo popular”, relató Scioli.
El embajador argentino recordó que tanto Fernández como Bolsonaro “habían expresado su predisposición” para mantener un encuentro, en febrero pasado, cuando Scioli y el canciller Felipe Solá visitaron al presidente de Brasil.
La gestión de Scioli y del canciller brasileño Ernesto Araújo terminó dando sus frutos durante una cena que el embajador argentino mantuvo la semana pasada con un hombre clave de la administración de Brasilia, el secretario especial de Asuntos Estratégicos, Flávio Viana Rocha, acompañado por el titular de la comisión de relaciones exteriores de la Cámara de Diputados, Eduardo Bolsonaro, hijo del presidente.
“Lo invitamos a Brasil, de nuestra unión será la felicidad de los pueblos. Espero poder verlo y darnos la mano”, dijo Bolsonaro, siempre según el relato del embajador Scioli.
Según reconstruyó luego Scioli, el tono “ameno” de la charla privada surgió a partir del fútbol.
En la reunión se habló también sobre la pandemia de coronavirus y el impacto en la salud y en la economía.
Ambos coincidieron en que “se viene la época de las vacunas”, sobre todo porque tanto Brasilia como Buenos Aires tejieron acuerdos para la adquisición y producción de inmunizaciones de la llamada “vacuna de Oxford”, del laboratorio Astrazeneca.
Scioli contó que ambos presidentes abordaron con los cancilleres Araújo y Solá la agenda bilateral que tiene que ver con proyectos conjuntos de energía nuclear.
Bolsonaro contó además que, poco antes de la cumbre virtual, habló con su ministra de Agricultura, Tereza Cristina Dias, para que se destraben algunas limitaciones a la entrada de productos agropecuarios argentinos.
(Fuente: Telám)