Hace casi una semana, un conductor, ya identificado, atropelló y mató a un cachorro de yaguareté hembra. Este trágico suceso llevó a los defensores de la fauna a salir a las calles para pedir a los conductores que reduzcan la velocidad y respeten los límites establecidos dentro del área protegida, con el fin de evitar más muertes de animales. Sin embargo, las acciones parecen ser en vano, ya que no se han registrado cambios significativos en el comportamiento de los conductores.
“Todos los días es lo mismo; nada cambia y siempre son los taxistas. Te sobrepasan, tocas la bocina y aceleran aún más”, reclamó el autor del video. “Nadie entiende, nadie cuida y a nadie le importa. Me voy a dedicar a registrar todos los días a quienes circulan fuera del límite de velocidad. Así seguirán ocurriendo siniestros y continuaremos lamentando pérdidas”.
El límite de velocidad entre Puerto Iguazú y el Parque Nacional no supera los 60 kilómetros por hora, e incluso hay sectores donde la máxima es de 40 kilómetros por hora. Esta zona presenta un alto movimiento de fauna.
Ayer por la tarde, los defensores de la fauna se reunieron en la zona de acceso a Puerto Iguazú para llevar a cabo una jornada de concientización. Dialogaron con los conductores y les explicaron la importancia de reducir la velocidad. Sin embargo, todas estas acciones parecen ser insuficientes.
Un grupo de vecinos autoconvocados se está organizando para presentar sus propuestas y compartir sus inquietudes con el gobierno provincial, con el objetivo de implementar medidas que obliguen a los conductores a respetar las leyes de tránsito.
(Fuente: El Territorio)
